Cambia Creencias, no Conductas
Comunicar Visión y Valores ¿genera resultados?, ¿ya están los trabajadores de tu organización trabajando como un equipo, innovando, centrándose en los clientes y reduciendo la burocracia, siendo a la vez atentos y flexibles, comprometidos y responsables? Seguramente no, pero ¿por qué?
Es un error pensar que podemos cambiar conductas, ya que las conductas son salidas (outputs), no entradas (inputs). La conducta es una expresión de las creencias de las personas y es ahí donde sucede el cambio. Decirle a las personas que tienen que comer sano, no les hace escoger brócoli en lugar de comida chatarra, incluso sabiendo que el brócoli es bueno para todos. Además, intentar cambiar las conductas pagando un bonus puede afectar a las elecciones de las personas, pero no a sus preferencias. Si les quitamos el bonus, su comportamiento volverá a ser el de antes.
Si ayudamos a las personas a creer en lo que hacen, su respuesta será orgánica y ellos mismos querrán hacer lo mejor. Pero para que esto suceda, tiene que haber un objetivo significativo en lo que les estamos pidiendo que hagan.
Estos son algunos ejemplos de cómo centrarse en las creencias para cambiar las conductas:
Una compañía farmacéutica comparte con sus empleados historias en las que pacientes consiguen realizar actividades diarias tras un tratamiento efectivo
Una compañía de seguros muestra cómo sus clientes planifican su futuro ya que se sienten protegidos
El gobierno de una ciudad comunica las razones que hay detrás del límite de velocidad en una cierta zona (por ejemplo, reducir el número de muertes), en lugar de usar radares de velocidad
Mientras usemos iniciativas que sólo comunican y refuerzan las conductas, estaremos contribuyendo al escepticismo y a la sensación de déjà vu que tan común es hoy en día en las organizaciones.
Aquí hay algo que puedes probar: revisa tus iniciativas de cambio y dirígelas de manera que informen creencias, en lugar de comunicar y controlar las conductas “correctas”. Podrás ver cómo las personas trabajan mejor cuando creen en lo que están haciendo.